Echo un vistazo al calendario: 2016 ya. Más de cincuenta añitos han pasado desde que The Pretty Things viesen publicado su primer single. La mejor banda (y que Brian Jones me perdone) de R&B británico de todos los tiempos. Y lo mejor de todo es que los Pretty Things continuan sobre los escenarios y como pudimos comprobar en su anterior gira de hace un par de años, ofreciendo a sus fans conciertos inolvidables.
Una carrera envidiable la de los Pretty Things, siempre rectos en sus convinciones e ideas, sin bajar la cabeza ante nadie, simplemente recorriendo su propio camino.
No es extraño que ese maestro de las seis cuerdas que es Dick Taylor decidiese un día abandonar a los mismísimos Rolling Stones, evolución de unos Little Boy Blue And The Blue Boys que había formado junto a Keith Richards y Mick Jagger. Taylor quería más crudeza, más energía y para ello dió forma a los Pretty Things junto a Phil May, compañero de estudios.
Los primos feos de los Stones, les colgaron los señores de la prensa. Cómo serían! Por su parte, May se enorgullecía de tener las melenas más largas de las Islas.
Estamos en 1964 y el sello Fontana se encarga de publicar el single del que hablábamos al principio. En la cara A, Rosalyn! Todavía hoy, cincuenta años más tarde, suena cruda y sucia. En esos surcos nació el Garage Punk de los Sesenta!
Otro par de discos pequeños, todos con entrada en listas y sale a la calle su primer largo, pura dinamita negra! He leido que The Pretty Things, el disco, hace que el primer trabajo de los Stones suene como los Beatles. Lo cierto es que suena crudo, salvaje, más que digno discípulo del R&B americano del que se emborracha, a mayor gloria de San Bo Diddley. El album alcanza el número diez de las listas británicas. Eran otros tiempos.
¿Por qué los Pretty Things no han alcanzado el reconocimiento general de otras bandas británicas que seguro están pasando por tu cabeza en este momento? Quién sabe! Quizás el públicos el publico que a día de hoy hace colas para ver a los Rolling Stones ante una pantalla gigante no tenga ni idea de quién es Dick Taylor, pero puedes estar seguro de que su influencia en el Rock&Roll de las últimas cinco décadas ha sido incalculable. Los Pretty Things han sido en muchas ocasiones los primeros en experimentar con estilos que luego otros han continuado y se han llevado el reconocimiento. Algunos de sus imitadores se han llevado el gato al agua, otros se han quedado con el reconocimiento y la pasta en su cuenta bancaria. Pero recuerda, los Pretty Things fueron los primeros… y los mejores!
Pregunta a Iggy Pop, los Ramones, Sex Pistols o Nirvana sobre su influencia, en lo musical y también en esa actitud ante la vida que ha marcado a generaciones. Sus melenas harían temblar al peluquero de Mick jagger y Brian Jones, fueron expulsados de Australia por drogas mucho antes de que Keith Richards fuese considerado el enemigo número uno de las aduanas de medio Mundo.
Pero lo más importante es su música… Los Pretty Things compusieron la primera Opera Rock en 1967, S.F. Sorrow. Grabado en los estudios Abbey Road que compartían con Beatles y Pink Floyd. Un disco que está a la altura de cualquier otra obra del estilo en la que estés pensando. ¿Tommy de los Who? Pregunta a Pete Townshend…
Tras S.F. Sorrow la banda grababa Parachute, de nuevo en Abbey Road y uno de los grandes discos de la época, votado en la revista Rolling Stone como disco del año 1970, por encima de Neil Young, Led Zeppelin, los Stones o los Who. Los mismísimos Pink Floyd reconocerían la inspiración que supuso Parachute para crear Dark Side Of The Moon…
En 1974 son elegidos como la primera banda que firma con Swan Song, el nuevo sello de Led Zeppelin. Esta asociación refuerza los lazos con el manager de Led Zeppelin, Peter Grant y con sus viejos amigos Jimmy Page (que había tocado en algunas de sus sesiones en 1965) y Robert Plant. En Swan Song publican dos excelentes discos y con el primero de ellos, Silk Torpedo, alcanzan por primera vez las listas americanas. Aprovechan entonces para girar por Estados Unidos junto a Led Zeppelin y hacen amistad con Aerosmith, cuyo cantante Steve Tyler siempre ha mostrado su admiración por Phil May y le ha considerado su mayor influencia.
En los ochenta se convierten en pioneros en otra faceta. Tras una lucha en los juzgados, se convierten en la primera banda de los Sesenta que consigue el control sobre todo su trabajo, aprovechando para remasterizar y reeditar sus discos y llegar a una nueva generación que parece reivindicar de nuevo a una banda única.
En los últimos años no han parado: han ganado el primer Mojo Hero's Award, Bruce Springsteen les pidió que tocasen junto a él en Hyde Park, han seguido grabando, publicando discos y tocando en directo, en festivales y en salas.
En 2016 la banda está en un momento verdaderamente dulce. Sus directos están a la altura de su leyenda y su último disco, The Sweet Pretty Things (Are In Bed Now, Of Course…), publicado en 2015, ha sorprendido a todo el mundo y se ha ganado a pulso el formar parte de algunas de las listas de los mejores discos del año. el formar parte de algunas de las listas de los mejores discos del año.
The Pretty Things son una de las bandas más importantes del Rock&Roll británico de todos los tiempos. No dejes de acudir a uno de los conciertos de esta gira si pasan cerca de tu casa!... y si no lo hacen deberías plantearte un viajecito…